El sindicato Satse Madrid y el de educación Anpe-Madrid han argumentado que no disponer de enfermera escolar supone “graves problemas ya que los docentes se ven obligados a atender necesidades de salud ajenas a sus competencias y conocimientos, y su carencia perjudica a determinados niños”.
Según ha explicado Ricardo Furió, Secretario de Acción Sindical de Satse Madrid, la Comunidad de Madrid tiene contratados a 400 enfermeras escolares y ha prometido contratar a otras 150, aunque la región tiene unos 1.800 centros educativos con financiación pública.
“Los centros escolares suelen tener enfermera escolar cuando entre su alumnado hay estudiantes con algún tipo de situación sanitaria especial, que requiere de ese recurso, pero la mayoría sigue sin tener este recurso”, explica Furió para añadir que este personal podría ocuparse, fuera de la situación de pandemia, de la asistencia en caso de accidente, la prevención, la detección de problemas de salud, o la información sobre sexualidad. “Sería muy positiva en cuanto a la formación de cuestiones de salud entre los estudiantes lo que incluye la adquisición de hábitos de vida saludables en edades tempranas y la reducción de riesgos de enfermedades futuras”, dice el sindicato.
Además, la enfermería escolar podría, además de sus labores propias, “hacer de enlace con los rastreadores, detectando casos en el núcleo familiar del alumno”.