Tom Bedwin llegó hace un año a Miraflores de la Sierra
Ya ha fotografiado al bibliotecario, a un poeta, un pintor, el repartidor de correo o una familia teletrabajando
Bedwin busca fotografiar a todos los habitantes de la localidad y montar con ello una exposición y una página web
El alma de los pueblos es su gente, algo así tuvo que pensar el fotógrafo Tom Bedwin que hace un año llegó a Miraflores de la Sierra y se propuso captar ese alma con su cámara. El bibliotecario, un poeta, un jardinero municipal o un repartidor de Correos ya han pasado y posado delante de su objetivo, aunque Bedwin quiere llegar a retratar a todos los mirafloreños, creando así un ‘retrato del pueblo’.
Tom Bedwin lleva 10 años en España. Bedwin creció también en un pueblo, como Miraflores, cercano a la capital, Pebmarsh a hora y media de Londres. “Llegué en 2010 justo después de terminar un Máster de Catástrofes Naturales. Quería aprender español para luego volver al caribe y montar un proyecto de educación sobre el peligro de tsunami. Todavía no he vuelto. (Pero no lo descarto totalmente)”, recuerda el fotógrafo quien apunta que “Como muchos, la cámara me funciona como excusa o pasaporte para meterme en donde no necesariamente podría sin ella”.
“Hace un año llegamos al pueblo de Miraflores de la Sierra. Es un pueblo con mucha historia que contar, ya que ha habido personas famosas que han pateado sus calles. Decidí que quería retratar a todo el pueblo – como un censo fotográfico – para crear un instantáneo del pueblo en este momento y también para llegar a conocer mejor el pueblo y sus habitantes”, explica Tom Bedwin.
El fin del proyecto, hecho en colaboración con el Ayuntamiento, es exponer unas fotografías en el pueblo y montar una página web donde se pueda ver un ejemplo de cada una de las personas que hayan participado.
Buscando un estudio
“Espero poder llegar a todos los habitantes del pueblo”, señala el fotógrafo, “Ahora mismo estoy buscando un edificio típico del pueblo que se encuentra en desuso para usarlo como estudio. De esa manera lo puedo abrir al público que se pase con la familia, con los amigos o a solas para hacerse un retrato y formar parte del proyecto”.
“Diría que son fotos con alma. Captaste perfectamente el vínculo entre los miembros de la familia y el sentimiento de protección en especial el nuestro hacia mi padre.”, señalaba uno de los vecinos que ya han posado ante su objetivo.
